La fecha de caducidad en los alimentos es un indicador clave de seguridad alimentaria. Sin embargo, según el ‘Barómetro de Seguridad Alimentaria’ de AECOC, el 67% de los españoles consume productos que han superado esta fecha. Además, un 76% ingiere alimentos más allá de su fecha de consumo preferente. ¿Realmente le damos la importancia que merece o estamos minimizando sus riesgos?
¿Qué significa la fecha de caducidad y la de consumo preferente?
Es crucial diferenciar entre ambos conceptos. La fecha de caducidad indica hasta cuándo un alimento es seguro para el consumo, ya que después de ese límite puede contener microorganismos dañinos. En cambio, la fecha de consumo preferente señala el periodo en el que el producto mantiene sus características óptimas, sin significar necesariamente que su consumo posterior sea peligroso.
¿Realmente los consumidores respetan la fecha de caducidad?
A pesar de que el 90% de los consumidores declara fijarse en la fecha de caducidad o consumo preferente, una gran mayoría sigue consumiendo productos vencidos. De hecho, el 9% admite haber ingerido alimentos con signos evidentes de deterioro, como moho o mal olor.
Los millennials (28-44 años) son uno de los grupos más tolerantes con este comportamiento, ya que el 58% de ellos no ve problema en consumir productos con alguna parte en mal estado.
¿Cómo identificamos si un alimento sigue siendo seguro?
La mayoría de los consumidores evalúa la seguridad de los alimentos basándose en criterios visuales y sensoriales:
-88% se fija en la apariencia, el olor y la textura.
-64% presta atención a la presencia de moho, la hinchazón del envase o la fecha de caducidad.
-58% desecha un producto solo si tiene alguna parte podrida.
Sin embargo, confiar únicamente en estos métodos puede ser engañoso, ya que algunos microorganismos peligrosos no generan cambios perceptibles en el alimento.
¿Qué opinamos sobre las alertas alimentarias?
Las alertas alimentarias generan reacciones divididas entre los consumidores:
-37% siente desconfianza y miedo ante este tipo de noticias.
-63% las considera una muestra de control y seguridad en la cadena alimentaria.
-68% de los consumidores retira únicamente el lote afectado, mientras que un 32% deja de consumir el producto por completo.
Entre los más jóvenes, las alertas tienen menor impacto, ya que solo el 43% de la Generación Z está al tanto de ellas. En general, prefieren informarse a través de redes sociales o el boca a boca, en lugar de los canales oficiales.
Riesgos de consumir alimentos caducados
El consumo de alimentos después de su fecha de caducidad puede provocar intoxicaciones y problemas de salud, especialmente en grupos vulnerables como niños, ancianos y personas con enfermedades crónicas. Algunas bacterias peligrosas incluyen:
Salmonella: causa fiebre, diarrea y vómitos.
Listeria: puede afectar gravemente a mujeres embarazadas y personas con sistemas inmunológicos débiles.
Norovirus: provoca gastroenteritis severa.
Aunque un alimento parezca en buen estado, puede contener microorganismos nocivos invisibles a simple vista.
A pesar de la importancia de la fecha de caducidad, los consumidores españoles no siempre la respetan. Si bien algunos alimentos pueden consumirse después de su fecha de consumo preferente, ignorar la fecha de caducidad representa un riesgo para la salud. Es clave reforzar la educación sobre seguridad alimentaria y mejorar la comunicación de alertas para evitar problemas de salud pública.