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Campos Peluqueros en Alcorcón: Belleza y confianza desde 1996

Campos Peluqueros , ubicado en calle Sapporo 26 en Alcorcón, es un claro ejemplo de cómo un negocio local puede crecer junto a su comunidad. Desde 1996 , este salón de peluquería y estética ha sido parte de la vida cotidiana del barrio, ofreciendo servicios de cuidado personal con cercanía, profesionalidad y dedicación.

Fundado por María Jesús Campos Navas , el local se ha mantenido fiel a sus valores: atención personalizada, compromiso con cada cliente y un ambiente acogedor donde cada visita se convierte en una experiencia.

 

Más que una peluquería, un lugar de confianza

Después de tantos años de trayectoria, la relación de Campos Peluqueros con sus clientes ha traspasado lo profesional. “Después de tantos años, la relación con la mayoría de los clientes es muy cercana, en algunos casos de amistad”, afirma su fundadora.

Esa conexión humana ha sido clave para que el negocio no solo se mantenga, sino que siga siendo una referencia de confianza en el barrio.Cada visita es una conversación, un reencuentro, un momento para sentirse bien.

 

Servicios de peluqueria y estetica para todos

Campos Peluqueros ofrece una amplia gama de servicios de peluquería y estética , siempre con un enfoque personalizado. La larga trayectoria del local garantiza experiencia, innovación, atención y adaptada a las necesidades de cada persona. Es un lugar para quienes buscan verse y sentirse bien. Cuenta con el respaldo de profesionales que conocen a sus clientes y saben exactamente lo que necesitan.

 

Presencia en redes y cercanía diaria

Además de su atención presencial, Campos Peluqueros también está presente en Facebook (Campor Peluqueros) , donde mantiene el contacto con su comunidad, informa sobre novedades y comparte su día a día. Ubicado en una zona tranquila y accesible, el salón ha sabido mantenerse cercano en lo humano. Durante casi tres décadas, el salón mantiene la constancia profesional y la fidelidad a su esencia.

 

Campos Peluqueros en Alcorcón es mucho más que un local de estética. Es parte del tejido del barrio. Un espacio donde, desde 1996, se cuida el estilo, pero sobre todo, la relación con las personas. Y eso no se improvisa: se construye día a día, con trabajo, confianza y cercanía.