Madrid dirá adiós al PGOU de 1997. En el primer semestre de 2027, el Ayuntamiento aprobará inicialmente el nuevo Plan Estratégico Municipal, parte del nuevo plan urbanístico de Madrid, un documento que marcará el rumbo del desarrollo urbano para las próximas décadas. Este plan no será solo una actualización técnica: se trata de una transformación profunda que busca responder a los grandes desafíos de la ciudad.
Tres ejes clave: vivienda, sostenibilidad y transformación urbana
El nuevo urbanismo de Madrid se estructura en tres grandes líneas:
-Ampliar la oferta de vivienda, especialmente para jóvenes.
-Transformar el espacio urbano, apostando por entornos más habitables.
-Avanzar hacia un modelo sostenible, eficiente y preparado para el futuro.
Más vivienda, más oportunidades
Uno de los retos más urgentes es aumentar el acceso a la vivienda. El plan contempla una fuerte participación de la Administración pública, sin dejar de lado la colaboración con el sector privado. Se fomentarán nuevos modelos habitacionales y se regenerarán espacios urbanos degradados, integrando vivienda protegida, usos mixtos y equipamientos para el barrio.
Un urbanismo más flexible y conectado
La ciudad necesita reglas más ágiles. Por eso, el nuevo modelo se plantea como una evolución flexible del planeamiento urbanístico, con menos rigidez.Se incluirán herramientas que permitan autorizar usos temporales, adaptarse a los cambios sin rehacer todo el plan y simplificar trámites administrativos, una demanda histórica de promotores, técnicos y vecinos.
Espacio público y biodiversidad como motor social
Las plazas, parques y equipamientos serán nodos sociales y ecológicos. La conectividad verde a distintas escalas —desde los barrios hasta toda la ciudad— será clave para reforzar la cohesión urbana y la biodiversidad. También se potenciará el diseño de espacios habitables, con más presencia peatonal, sombra y naturaleza urbana.
Madrid apuesta por la movilidad sostenible
El nuevo urbanismo prioriza los espacios verdes y el transporte multimodal. Se impulsará un sistema más eficiente para personas y mercancías, se adaptarán las infraestructuras a las nuevas formas de movilidad y se fomentará el uso de transporte eléctrico y compartido.
Hacia una ciudad climáticamente neutra
Tras alcanzar la mejor calidad del aire de su historia, Madrid quiere ir más allá. El plan busca avanzar hacia la neutralidad climática, mediante más puntos de carga eléctrica, energías renovables, y construcciones con criterios de eficiencia energética.
Innovación, digitalización y cultura como pilares del cambio
Madrid se consolidará como una ciudad inteligente y transparente, con una base sólida de datos urbanos, sistemas de análisis y herramientas digitales para tomar decisiones mejor fundamentadas. La cultura y el patrimonio de Madrid también serán protagonistas, con más inversión en rehabilitación y protección del legado histórico, apostando por una ciudad policéntrica, equilibrada y abierta al turismo de forma sostenible.
Un modelo participativo y compartido
El alcalde Almeida ha señalado que este plan es un punto de partida, no de llegada. “Madrid se construye entre todos”, ha afirmado, resaltando la importancia del trabajo colectivo, la escucha ciudadana y el consenso institucional.
Un urbanismo del siglo XXI
El Nuevo plan urbanístico de Madrid propone un cambio profundo pero realista. Su objetivo es claro: convertir a Madrid en una ciudad más justa, más verde y más habitable, que se adapte a las necesidades actuales sin perder de vista el futuro.