El Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado la remodelación de la Plaza de Pablo Neruda, situada en el distrito del Eixample. El objetivo es convertir el espacio en un área de uso vecinal, con mejores accesos, nuevas zonas de sombra y espacios para la práctica deportiva.
Este proyecto, que ha contado con la participación del vecindario del Fort Pienc y la Sagrada Familia, busca mejorar las deficiencias actuales de la plaza. Se trata de una iniciativa clave para dinamizar el entorno y favorecer la socialización en el barrio.
Un diseño más inclusivo y accesible
La nueva Plaza de Pablo Neruda contará con un diseño más inclusivo, pensado para todos los vecinos. Se mejorarán los accesos y se crearán espacios seguros y accesibles para que niños, jóvenes y adultos puedan disfrutar del área.
Además, se instalarán zonas de sombra con nuevos árboles y elementos de vegetación para ofrecer mayor comodidad a los usuarios. Estas mejoras buscan hacer de la plaza un lugar más agradable y sostenible.
Un espacio pensado para el deporte y el ocio
Uno de los cambios más significativos será la transformación de la pista de patinaje actual, que se encuentra demasiado cerrada. En su lugar, se instalará un circuito de ‘pump track’, ideal para la práctica de deportes como el patinaje y el hockey. También se habilitará un nuevo espacio de entrenamiento deportivo, pensado para fomentar la actividad física en el barrio. Se incluirán juegos infantiles como un rocódromo, una pizarra, juegos pintados en el suelo y una mesa de ping-pong.
Un presupuesto de 2 millones y obras en 2026
El Distrito del Eixample ha informado que la remodelación de la plaza tendrá un presupuesto de 2 millones de euros. Se espera que las obras comiencen en el primer trimestre de 2026, tras haber trabajado el proyecto con escuelas y colectivos del barrio.
Con esta intervención, el Ayuntamiento de Barcelona busca modernizar la Plaza de Pablo Neruda y convertirla en un referente de convivencia y bienestar para los residentes.
Un espacio renovado para todos
La transformación de la Plaza de Pablo Neruda en el Eixample responde a la necesidad de crear espacios más accesibles, sostenibles y dinámicos en Barcelona. La incorporación de nuevas áreas de ocio, deporte y sombra mejorará la calidad de vida de los vecinos y hará de esta plaza un lugar más acogedor.