El Gobierno de España ha dado un paso importante para garantizar los derechos de las personas con discapacidad. A partir de ahora, quienes necesiten un perro de asistencia podrán acceder a todos los espacios públicos y privados, sin restricciones, en cualquier parte del territorio nacional.
Esta medida será posible gracias al nuevo real decreto impulsado por el Ministerio de Derechos Sociales. El objetivo principal es eliminar barreras, acabar con la discriminación y unificar la normativa vigente en todas las comunidades autónomas.
Un cambio que unifica la normativa y amplía derechos
Hasta ahora, cada comunidad aplicaba una normativa diferente sobre el acceso con perros de asistencia. Con este nuevo decreto, se actualiza la legislación nacional —vigente desde 1983— y se establece un marco legal unificado para garantizar la movilidad, independencia y participación social de las personas con discapacidad. Según ha afirmado la secretaria de Estado Rosa Martínez, se trata de un avance clave para lograr una sociedad más justa e inclusiva.
¿Dónde podrán entrar los perros de asistencia?
La nueva normativa permitirá que las personas con perro guía accedan a espacios donde habitualmente no se permitía la entrada de animales. Algunos de los lugares incluidos son:
– Colegios y centros educativos
– Supermercados, mercados y comercios
– Restaurantes, bares y cafeterías
– Museos, teatros y espacios culturales
– Playas, piscinas y parques acuáticos (sin acceso al agua)
– Alojamientos turísticos y hoteles
– Lugares de trabajo y transporte público, incluido el avión, sin pagar billete adicional
Este decreto garantiza que no se pueda denegar el acceso por ir acompañado de un perro de asistencia, y considera cualquier impedimento como una vulneración del derecho a la igualdad y la accesibilidad.
Reconocimiento legal de la unidad persona-perro
Otro aspecto importante del decreto es que reconoce la unidad funcional entre la persona con discapacidad y su perro guía. Esto significa que no se trata de un simple acompañamiento, sino de un vínculo esencial para la autonomía de la persona.
Además, se establece que los perros solo podrán ser adiestrados por profesionales acreditados oficialmente para garantizar su formación adecuada en tareas de asistencia, socialización y comportamiento.
El perro de asistencia también tiene derecho al descanso
Por primera vez, la ley reconoce que los perros de asistencia tienen un ciclo de vida útil. Una vez cumplan 10 años de servicio, podrán dejar de trabajar activamente, pero seguirán teniendo derecho a acceder a los espacios públicos como parte de la unidad con su usuario. Este gesto dignifica su papel y asegura que sean tratados con el respeto y cuidado que merecen después de años de entrega.
¿A quién beneficia este decreto?
El decreto está pensado no solo para personas ciegas o con discapacidad visual, sino también para muchos otros colectivos que dependen de estos animales:
Personas con discapacidad auditiva o sordoceguera, que necesitan perros que les alerten de sonidos, con discapacidad física, que requieren ayuda en tareas cotidianas,con trastorno del espectro autista, que encuentran en el perro un apoyo para su autonomía y, por último, personas con patologías que provocan crisis médicas, que necesitan perros entrenados para emitir alertas.
Un paso firme hacia la inclusión real
El Gobierno de españa se une a un gesto de humanidad y respeto hacia miles de personas que necesitan un perro de asistencia para vivir con libertad. Garantizar su acceso sin barreras es garantizar su dignidad. Desde ahora, cualquier persona acompañada por uno de estos animales tendrá los mismos derechos que cualquier ciudadano, sin excusas ni excepciones.